FLUORESCENT ADOLESCENT !

Buenas noches lectores cara de pija. Estoy con bastante malhumor, así que este posteo va a tener unas cuantas puteadas inofensivas. ¿Por qué? En primer lugar me vino, me duele la cabeza, ayer y hoy comí como la más hija de puta. Segundo, hace un ratito quería entrar al Facebook y no me dejaba porque tenía que habilitar unas Cookies de mierda. Digo 'bueno, no me deja entrar, entonces escribo alguna pedorrada en el blog'. ¿Qué pasa? Necesito activar las Cookies y la puta que te parió. Bueno, tuve que habilitarlas para que la computadora se deje de joder y pueda postear. En fin, me encuentro aquí escribiendo desde la casa de mi abuela con el culo cementado a una silla de reporonga, con mi perro que viene a joder cada dos por tres, le acabo de mandar dos tremendos megapatys a mi pobre estómago que nunca se cierra y estoy poderosamente al pedo. Volviendo al grano, el tema de charla para hoy son los estereopitos, el cual AMO bardear. Aquí vamos!
Como todos saben, es obvio que estoy en contra de ese 'ideal de belleza' que tiene la sociedad de hoy en día (ya se, parezco tremenda vieja). También saben que no me gusta ser como el resto y que de alguna forma hago todo lo contrario a los demás. Odio la normalidad, odio a la gente sin personalidad, odio a la gente pelotuda que se quiere hacer la pro hablando con palabras que ni él mismo entiende, odio a todos los que siguen el ideal de la sociedad, odio a los que quieren imponerse pero son más inútiles que Ricardo Fort y odio a Ricardo Fort y todos sus derivados.
Para resumir un poco, no me caen bien los que no tienen ni una goma de personalidad y lo único que hacen es el Copy-Paste, que para colmo les sale mal. Onda, uno se caga exprimiéndose la cabeza para intentar escribir algo descente y el otro (como pelotudo inservible que es), ya que no tiene ganas de pensar, copia el texto entero de la otra persona y ni siquiera le cambia el color de la letra. ¿Hace falta ser tan boludo? ¿Qué pasa, llegó la era de la gente decerebrada? Y buen, en este caso podemos culpar a los zombies hambrientos de Neptuno.